Un chaleco de pelito (con tela de Traetela)

Hola!

¿Cómo va la semana? Por mi parte cada vez veo más cerca las navidades, y ya empiezo a pensar en los modelitos que les pondré a los peques.

Como novedad, este año me estoy planteando hacer algún DIY para incluir dentro de los regalos de Reyes, que siempre me ha parecido que le da un toque personal. Pero bueno, a ver en qué queda... Si finalmente lo hago, tened por seguro que os iré contando!

Hoy os traigo un chaleco de pelito que le hice a Eli con un retal de tela de viyela que me sobró del vestido del post anterior y con una tela de pelo que compré en Traetela 

 



Quiero hacer una parada aquí para hablaros de esta tienda, que es una de mis tiendas fetiche de telas por internet: Traetela

Bueno, no es que sea una de mis tiendas fetiche, es que, por el momento, es la única en la que me atrevo a comprar telas a distancia. Siempre me ha dado mucho yuyu comprar telas por Internet, por aquello de que los colores cambian vistos en el ordenador, no puedes tocar la tela, no puedes ver la caída, etc. Además, como tengo la suerte de vivir en Madrid, hay bastantes tiendas de telas "a mano" para poder ir a comprar insitu.

Pero me hice muy fan del blog que tiene Mar, la dueña de la tienda de Traetela, porque publican muchos tutoriales e ideas que me resultan muy interesantes y durante un tiempo, me pasaba por la página de la tienda, asombrándome siempre por la cantidad de telas originales, motivos y texturas que tenían. Así que un día me dio la vena y me decidí a hacer un pedido. Desde entonces les pido habitualmente telas, y siempre salgo encantada (ya iréis vuendo otras telas en otros modelitos, que son para morirse de bonitas).

En esta coasión, tenía en mente una tela así como de pelo, pero que fuese más infantil (no tan seria como encontré en otras tiendas de Madrid) y, como no, allí había variedad. Finalmente me decidí por una tela súper suave y amorosa, en un gris clarito, que hace como formas de nubes. Si puedo ponerle algún pero, que en realidad es más cosa mía como novata, es que al cortarla suelta mucho pelo, como cuando te cortas el flequillo en casa, pero a lo grande.

Vamos, que cuando la corté durante la clase de costura, estuvimos todas dos horas tosiendo pelitos y rascándonos la cara.

Pero bueno, que todos los problemas sean esos!!!

El caso es que, como el vestido que os mostré en el post anterior era de manga larga, tenía yo pensado combinarlo con un chaleco de forma que, al menos en el entretiempo, sena suficientes el uno con el otro y no haya que ponerle a Eli un abrigo.

Así que, como suelo hacer, me puse a rebuscar por internet y encontré varias ideas sencillas, como que para hacer un patrón de este tipo de chalecos, basta con tomor como base una camiseta, en este caso de Eli. Además, le bajé un par de centímetros las sisas y le di un centímetro de holgura por cada lado, para que vaya cómoda y tenga libertad de movimientos.

Aquí podréis ver un detalle del forro, que es del mismo estampado que el vestido:

Para abrocharlo, aproveché la cinta de terciopelo gris que me sobró del vestido y que le iba que ni pintado.

Le di un poco de forma al bajo delantero del chaleco para que quedara más redondeadito, que me parecía más mono.

La costura fue muy fácil, la verdad. Buceé por Internet en busca de ideas y fui picando de muchas páginas. En concreto, encontré un tutorial muy sencillo.

Os recomiendo dar una vuelta por esta página, que tiene cosas muy interesantes.

Y este es el resultado combinado con el vestido de Mamacosesola:

Espero vuestros comentarios y, como siempre, no dudéis en escribirme si tenéis alguna duda sobre como hacerlo.

Besitos!!!

Eli